
Entrena tu cerebro: Descubre 7 técnicas que te ayudarán a tomar decisiones con más claridad para tu negocio.
Hay técnicas para entrenar tu cerebro que te van a ayudar a tomar decisiones más eficaces y acertadas en tu día a día, tanto a nivel personal, como profesional.
Acá te dejamos algunas técnicas que aliviarán tu fatiga mental y, aunque hayas tenido 10 reuniones en un día, al terminar tendrás la capacidad de seguir tomando buenas decisiones sin caer en agotamiento mental y actuación por impulsos que puedan afectar a tu negocio.
Elige lo que sea “suficientemente bueno”
Entrena tu cerebro para ser feliz. Y empieza por elegir las opciones que sean lo suficientemente buenas como para quedar satisfecho.
Muchas veces, la gran cantidad de alternativas a escoger, nos lleva a invertir más tiempo en ese proceso y a agotar nuestro cerebro. Eso nos hace más infelices.
Por eso, la primera técnica propone que, para aspectos cotidianos de consecuencias irrelevantes, te conformes con lo suficientemente bueno y no gastes demasiado tiempo en la decisión. Así, tendrás más energía para aplicar en las grandes decisiones que requiere tu negocio.
Busca velocidad
En las empresas hay veces que los procesos de decisiones se alargan por un tiempo excesivo. Normalmente por motivos como la envergadura del tema a tratar, porque no se tiene toda la información, o porque hay que consultar a demasiada gente, afectando a la calidad de la decisión final. Por lo que apostar por un proceso rápido basándote en la única información que hay disponible, puede ser una mejor solución que dilatar la espera.
Sopesa todas tus opciones
Cuando estamos ante dos opciones, lo ideal es valorar el potencial de ambas. Porque lo habitual es que la repercusión que vayan a tener en la empresa no sea la misma.
Entrena tu cerebro analizando las alternativas, más allá de lo superficial. Si eres capaz de ahondar en la parte menos visible, la elección final será más acertada.
Piensa en corto plazo
El perfeccionismo es el peor enemigo de la toma de decisiones. Y en el ámbito de los negocios, este enfrentamiento es aún mayor.
Partiendo de la base de que la perfección no existe, a lo único que nos lleva este tipo de actitud es hacia la procrastinación. Es más importante pasar a la acción que no hacer nada.
Así, por ejemplo, cuando una empresa está sumida en el lanzamiento de un nuevo producto, lo ideal sería hacerlo con la mínima versión viable.
Con el tiempo, se podrá mejorar y añadir detalles para optimizar su calidad y funcionamiento (pero en ningún caso la perfección puede ser un obstáculo).
Consulta con gente en la que confías
Delegar en personas de confianza, y apoyarte de herramientas de gestión de trabajo, es vital para un negocio. De otra forma no podría crecer. ¿Te imaginas a un empresario encargándose de todas las responsabilidades que implica sacar adelante una compañía? Sería inviable.
Delegar alivia la carga mental a la hora de tomar decisiones y aporta nuevos puntos de vista que, en la mayoría de ocasiones, suman valor a la elección final.
Existen juegos para entrenar tu cerebro que se podrían poner en práctica en equipos de trabajo para fortalecer este aspecto. Es una idea que ya están implementando algunas empresas.
Ponlo en papel
Escribir lo que estás pensando y sopesando te da claridad y seguridad, sea lo que sea. Cuando lo haces, tienes la garantía de que no te olvidas nada y de que estás valorando todos los aspectos relevantes que necesitas para tomar una decisión eficaz.
Imagina el peor escenario posible
Visualizar las peores consecuencias que podría tener una decisión, sirve para mejorar la calidad de las mismas. Se trata de un ejercicio para entrenar tu cerebro, que te ayuda a detectar posibles impactos que antes no habías considerado, y que tienen un peso importante en tu elección.
Así muchas empresas, antes de entrar a un nuevo mercado, se plantean qué es lo peor que podría pasar si no sale bien. Y eso les permite tomar una mejor decisión.